El fotoperiodista Fidel Raso ofreció el 6 de agosto en Primera Página su particular visión de la fotografía. En el taller de fotografía documental subtitulado Algo más que un clic e impartido por este profesional con 40 años de experiencia, participaron 13 personas de muy variadas edades, inquietudes y profesiones. Raso comenzó y terminó con un manual de psicología en la mano, pues los condicionantes psicológicos y culturales, personales y sociales, a la hora de ver y de hacer fotografías centraron en buena parte su clase magistral, salpicada con multitud de ejemplos gráficos. Entre el material que empleó para mostrar a los alumnos las distintas “lecturas” de las imágenes y algo de la historia de la fotografía documental, hubo decenas sacadas por él en escenarios próximos y lejanos, actuales y también con varias décadas de historia. Desde experimentos visuales como los de la serie La ciudad envuelta, expuesta en los años 80, y en la que convirtió los cables y otros obstáculos en objeto de artísticas fotografías, a instantáneas de fotoperiodismo clásico, Raso mostró a los asistentes cómo nuestro cerebro, condicionado por todos los factores citados, está predispuesto a “ver” determinadas cosas y soslayar otras. Con varias fotos tomadas en Urueña expresamente para el taller, el fotógrafo retó a los participantes a mirar un poco más allá de lo que solemos hacer habitualmente y las animó a buscar en sus fotos contrastes y aspectos de la realidad que están ahí pero que hay que buscar, colocando la cámara “no sólo en el ojo”, sino en el alma.
“Seguramente en los dos últimos siglos ha habido dos cosas que han modificado la historia del hombre: La precisión en las armas de guerra y la captación de imágenes de alta calidad y su comercialización”. Esta fue una de las reflexiones con las que Raso cerró el taller, instando también a los presentes a analizar las imágenes que ven a diario a través de los medios de comunicación y que buscan, y logran, “modificar” conductas y modelan nuestra percepción del mundo.
El debate dio para mucho y extendió la duración del taller, que terminó con la entrega de diplomas y con el sorteo de una fotografía de Raso, el retrato de un trabajador de Altos Hornos de Vizcaya que forma parte de su libro Semillas de hierro (Edex, 1995), que dio origen a una exposición en el Museo Etnográfico de Bilbao.
Los participantes prometieron enviarnos una de sus fotografías, que publicaremos en esta web y en las redes sociales de la librería. La segunda galería de imágenes es de uno de uno de los asistentes al taller, el fotoperiodista Fernando Sanz.