De la rosa nos queda el nombre y de Eco, su obra

“Hace frío en el scriptorium, me duele el pulgar. Dejo este texto, no sé para quién, este texto, que ya no sé de qué habla: stat rosa pristina nomine, nomina nuda tenemus“.
De la rosa nos queda el nombre, del escritor y semiótico Umberto Eco (Alessandria, Italia, 5 de enero de 1932 – Milán, 19 de febrero de 2016) tenemos en Primera Página algunas de sus mejores obras, y dejamos aquí el excepcional final de su más famosa novela.
Por cierto, que en su cuenta de Twitter, el escritor dejó esta última reflexión, el 21 de noviembre de 2015: C’è un ritorno al cartaceo, il giornale non sparirà almeno per gli anni che mi è consentito di vivere (“Hay una vuelta al papel, el periódico no va a desaparecer, al menos en los años que se me permita vivir”). La anteúltima, del mismo día, reza: Oltre a custodire la memoria storica, gli strumenti multimediali possono essere dei dispositivi per rinforzare la capacità di ricordarare (“Así como para preservar la memoria histórica, las herramientas multimedia pueden ser dispositivos para reforzar la capacidad de recordar”. Sea.