Unos pocos metros cuadrados, mucha gente, música, pipas… El Avión Club se reencarnó el 18 de noviembre en Urueña, la Villa del Libro, de la mano del periodista y escritor Carlos Santos, invitado por la librería Primera Página. El salón de un antiguo restaurante de la localidad sirvió de escenario para recrear el ambiente de este mítico y ecléctico local madrileño, que Santos utilizó para reconstruir, en forma de crónica novelada, una apasionante y decisiva década de la historia contemporánea de España. Acompañado de la también periodista y escritora Nieves Concostrina, el autor compartió con el público recuerdos de aquellos años de libertad y alegría, de prosperidad sin precedentes, pero en los que también comenzaron a vislumbrarse problemas que hoy nos son muy familiares.
Entre el público, algunos de quienes conocieron «el último café cantante de Madrid», con sorpresas como la aparición de «el Chino» uno de los personajes de la novela, a la puerta de «un minúsculo restaurante chino» próximo al Avión Club y que en realidad se llamaba Ángel Ballesteros y era de Toledo. Autor y personaje real se fundieron en un abrazo después de muchos años sin verse. Otra de las sorpresas de la tarde fue la revelación de que una de las escasas fotografías del protagonista del libro, el pianista César Martínez, había aparecido en Urueña. El autor es el encuadernador Fernando Gutiérrez, quien en aquellos años trabajó como fotógrafo para La Guía del Ocio y que captó toda la esencia de este hombre singular que durante cuarenta años puso música al local y banda sonora a las vidas de los clientes, personas de toda clase y condición, que pasaron por el Avión. La imagen capta la sempiterna sonrisa de César, parapetado tras la barra, con su cigarrillo en la boca, las manos al piano, sobre la tapa, la cajetilla de Peninsulares y rodeado de cajas de cerveza y cachivaches.
La música la puso la periodista y librera de Primera Página, Tamara Crespo, con un trabajo de recopilación de todas y cada una de las referencias musicales (temas, autores y estilos no solo de los 80 sino de las más diversas épocas) que pueblan el libro. Son 170, que suman exactamente 11 horas y un minuto de música, disponibles en una lista pública de la aplicación Spotify llamada Avión Club y de la cual, el autor eligió para reproducir durante la presentación 15 temas agrupados en una segunda lista (Avión Club, selección de Carlos Santos).
Con el aforo completo y un entregado público que participó con sus personales visiones y experiencias de los 80, entre risas, momentos para la nostalgia y para el análisis, el Avión, cerrado en el año 1994 víctima de la especulación inmobiliaria, se materializó por unos momentos en Urueña, con el espíritu de César y la música de fondo de uno de los temas que más le pedían los clientes y que él tocaba solícito dos o tres veces cada día, la evocadora As Time Goes By de la película Casablanca.
La de Urueña fue prácticamente la primera presentación del libro, ya que solo hubo una anterior en Almería, donde Santos creció y ejerció durante sus primeros años como periodista, siendo director de La Voz. Actualmente es subdirector del programa de RNE No es un día cualquiera, dirigido por Pepa Fernández, en el que colabora Nieves Concostrina, que fue compañera suya en el extinto Grupo 16 en la época de la novela, por lo que se generó una interesante conversación entre ambos. La siguiente presentación de Avión Club está prevista en Madrid el 28 de noviembre.